miércoles, 16 de febrero de 2011

Plebeya cerveza

“La creciente importancia de la moda a la hora de determinar los tipos de bebidas que se consumía a finales del siglo XVII adquire, de este modo, una relevancia especial, puesto que indica que el mercado estaba siendo, hasta cierto punto, manipulado y desarrollado por quienes disponían del capital para invertir en la producción y el comercio de estas nuevas bebidas”
El vino y las modas. El snobismo en el vino. Del siglo XVII al XXI. Leo las recomendaciones sobre vino de un blog de tendencias y moda. Al parecer, para ser un entendido en vino hay que saber cuántos puntos Parker recibió el Contador de Benjamín Romeo, el vino blanco no se puede guardar en la nevera sino en una cava para vino y la cerveza es asquerosa, digna del populacho anticuado y poco dado a la moda. ¿Eso es enología? ¿hedonismo? ¿tendencia? Enopatismo talibán.
Conozco también sumilleres veinteañeros que dicen saber más de lo su experiencia en el vino o en la vida anticipa. Clientes de restaurantes que desprecian las recomendaciones, que con todo corazón, les hace el personal del establecimiento con aire de superioridad intelectual. Comensales que rechazan botellas en perfecto estado en un intento patético de demostrarle a la rubia de turno lo entendidos que son. Como si eso les fuese a ayudar a terminar la noche con la espalda arañada.
Culturetas del vino, impostores y prepotentes que te miran por encima del hombro y se apuntan a la moda de lo biodinámico porque es lo último, lo más, y qué leches, si lo hace Romanée Conti tiene que ser lo mejor. Digo yo que si tienen la desgracia de padecer una grave enfermedad correrán al homeópata. O cambiarán de trabajo según lo que esa mañana diga el horóscopo (homeopatía y astrología tienen tanto rigo como los escritos de Steiner).
Si éste es el teatro donde se representa la función del vino en el contexto social actual, yo me salgo de la sala para entrar en la que representan el vino como disfrute de una buena compañía.

5 comentarios:

  1. La cita inicial está sacada del libro de Tim Unwin "La viña y el vino".

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  2. el único sumiller con el que he hablado en mi vida (a parte de ti)me dijo de manera casi categórica, que la única manera de saborear y disfrutar de un buen vino es en soledad y en silencio... me pregunto si los dueños del restaurante sabían de sus ideas... nosotros acabamos pidiendo agua (vaaaaale y una coca-cola light para mi)

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  3. ¿soledad y silencio? el vino es una bebida social, si le quitas esa connotación lo matas.
    PD: yo no soy sumiller, cariño.

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  4. ... en realidad quería decir que tu eres la única persona que conozco entendida (de manera demostrable) en vinos

    !!!!

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  5. Tao:Has hecho un magnifico post absolutamente real....El quiera recordar se puede acordar de esos comportamientos en la mesa de al lado de un restaurante.Verguenza ajena ante esas actitudes de horteras , new rich de pacotilla....es poco.
    Un "ultra" abrazo.
    Victor

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